sábado, 21 de abril de 2012

Incertidumbre

Una ciudad que veo al revés
Porque al derecho es imposible verla

 Una que permite que su existencia  transcurra perdida
En el alba tibia y taciturna de un día.

Una ciudad que florece para pocos
Pero que para muchos es hogar

Un espacio, un terrenoUna historia
Que se forma, se deforma y se transforma;
En arrullo tibio y alegre de la gaita y el tambó

Una ciudad con destellos de sol enternecido
Y cielos despejados; Esa que se cubre por momentos
Con tapetes de flores de colores y hojas se secas de almendros


La misma que se baña cada vez que le es posible
Con la luz blanca y nostálgica
De esta: su luna  seductora.

A esta ciudad que vibra cada vez que
Los truenos fríos de la lluvia la tocan;
Porque no es usual, porque es calor, porque es color.




 Karen Mercado

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